Venezuela es un poema inconcluso, algo siempre falta o sobra, nunca se termina y siempre se corrige, como si la vida no fuese más que volver sobre sus versos y corregir palabra a palabra cada trozo de la historia. Venezuela anida en el fondo del lamento, ese abismo profundo al lado del alma, una tentación que siempre invita a la nostalgia, aunque sepas desde antaño que ofrecerte más no puede salvo tus recuerdos vencidos. Venezuela es un poema inconcluso, sin rumbo claro más que el norte o el sur o los laterales a los que llegue su frontera. Es la mezcla de la belleza del mundo allí, al norte de un sur al que no le importa. Venezuela es mi poema eterno, esa especie de amor platónico siempre distante, aunque la habites, siempre cercana, aunque estés lejos. Irse es lo mismo que quedarse, nadie está exento de la barbarie, el caos y sus secuaces. Siempre hay un “por si acaso” cerca, siempre un “cuídate” al borde del camino. Nada en Venezuela es lo que parece, salvo el azul turquesa ...
Blog literario de la escritora venezolana María Luisa Angarita: su poesía, ensayos, artículos, crítica literaria y cine, reflexiones en torno a la palabra, teología y fe. Su oficio escritural desde la infinitud de las palabras.