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Mostrando entradas de marzo, 2017

La muerte y sus diversos rostros en el libro “Todos Somos Mortales” (2016) de Manuel Cabesa.

-María Luisa Angarita-             En el libro Todos somos mortales (2016), Manuel Cabesa nos presenta una serie de cuantos cortos o mini cuentos donde el mundo recreado surge y se sustenta en este otro mundo paralelo que rodea al autor, el mundo verdadero.             En palabras de Reis y López ( Diccionario de Narratología , 1996), son “los textos narrativos los que mejores condiciones reúnen para escenificar la ficcionalidad a través de la deconstrucción de mundos posibles” (p. 97). En el caso que nos ocupa, la ficcionalidad forma parte del mundo real, se nutre de ella para luego transformarla en otra existencia, así los personajes pueden irrumpir en la historia desde otro mundo, la vida resulta una construcción más del narrador, el personaje que nos habla no existe en su propia existencia pues parte de su muerte para hablarnos.             El más allá cobra vida dentro del libro, más no desde la sangriento, sino desde ese cúmulo de complicaciones que la no-vida i

Palabra y Poesía. A propósito del día mundial de la Poesía.

-María Luisa Angarita- Existe un espacio donde las palabras no significan, sin importar el tono, la escritura y su gramática, ni siquiera el contexto. Hay un momento, un tiempo exacto en que pierden su esencia, dejan de ser transformación para ser menos que el silencio, para ser vacío. Simplemente se secan, pierden su aura magnética, esa fortaleza que otrora transmitían, se vuelven ramas secas, un extenso mar sin oleaje ni sonidos. En ocasiones también se mueren de tristeza, pierden su esencia entre el lamento de no poder significar, de pasar días y noches intentando transmitir un mensaje que se pierde en el fondo de la incomprensión, de la mala interpretación y sus desencantos. Por eso a veces también prefieren el silencio.

Sobre la soledad

-María Luisa Angarita- En el silencio de las horas la soledad nos invade, se adhiere al alma como un tormento ineludible y no cesa. A veces no importa cuánto ruido nos acompañe, ni cuantas horas de risas y palabras intenten dispersarla. Simplemente aparece y no se aleja, como si la existencia estuviese marcada por esa sensación inquebrantable, como si fuese eminentemente necesaria para la subsistencia. Pasan los autos, los quebrantos, los amigos y ella permanece, etérea e intocable pero tan opresiva que sólo queda asirse de su esencia y respirarla.

Defensa e interpretación de la fe en el filme “Dios no está muerto” (2014)

-María Luisa Angarita- En el filme “Dios no está muerto” (USA. 2014) se hace un planteamiento bastante común del debate constante entre creyentes y no creyentes en la existencia de Dios. Es una película con historias simultáneas que se van entrelazando entre sí bajo la temática central de la fe en Dios, o de al menos, el reconocer su existencia. La historia central, un estudiante que se ve en la obligación por fe y convicción de defender su creencia frente a un profesor de filosofía que se dice ateo pero que inicia su clase hablando de Dios y su inexistencia. En cuanto a argumentación podríamos aceptar la idea de la tesis del profesor para poder enmarcar la historia en una zona de defensa de la fe, no obstante resulta absurdo el inicio de una trama con un argumento que ya desde el inicio no sólo denota la existencia de Dios, si no la capacidad de duda que puede generar en las personas su inefable existencia. Es decir, si Dios no existe, ¿para qué hablar de él? Esto es reafirm

De la reforma de Lutero a la Reforma de Francisco, cinco siglos después ¿comprendimos?

María Luisa Angarita.       Cinco Siglos han transcurrido desde que Martín Lutero iniciara en Europa, en el propio seno de la Iglesia Católica un proceso de reforma que acabaría dividiendo la unidad de los cristianos. Sin embargo, este proceso tuvo lugar quizás menos a las acciones de Lutero y más a las acciones de los Pontífices precedentes y a una gran parte del clérigo. Ya dos siglos antes se respiraba en Europa una sed de reforma que encontraba sus voces entre el mismo clericado, entre los cristianos laicos e incluso entre los hoy reconocidos grandes exponentes del arte europeo como Dante Alighieri (razón de que sus libros entrasen en la lista negra de los libros prohibidos de la Iglesia). La oposición al Papa aumentó considerablemente en el siglo XIV en palabras de Hans Küng (2014) “Tuvo su origen en las universidades, colegios y escuelas, en el surgimiento de la clase media en las ciudades y entre las personalidades literarias y los Juristas más influyentes.” (p. 118) [1

El Absurdo Latinoamericano frente al Absurdo Europeo: una mirada a Dos Viejos Pánicos y Esperando a Godot

-María Luisa Angarita-  La obra  Dos Viejos Pánicos de Virgilio Piñera es considerada una de las obras más características y representativas del teatro del absurdo latinoamericano, en ella encontramos situaciones alucinantes que al ser comparadas con el absurdo europeo demuestran que la realidad latinoamericana es mil veces más delirante e ilógicamente cotidiana en comparación al resto de la humanidad. En el presente trabajo analizaremos algunas diferencias existentes entre la obra de Virgilio Piñera Dos Viejos Pánicos y la obra de Samuel Beckett Esperando a Godot . Virgilio Piñera En el texto de Piñera encontramos tanto absurdo de situación como absurdo de lenguaje: el absurdo de situación se evidencia en la necesidad del personaje Tabo de quemar figuras de personas recortadas de la prensa como una forma de exterminar a toda la población joven del planeta debido al odio que le tiene a la juventud y el miedo a la vejez. Otras situaciones absurdas dentro del texto s

De “Ensayo sobre la ceguera” a “Ceguera”: la metáfora del mundo desvirtuada en el cine.

De “Ensayo sobre la ceguera” a “Ceguera”:  la metáfora del mundo desvirtuada en el cine. -María Luisa Angarita-             Sin duda alguna el cine es una de las formas del arte, si no la única, que mueve masas constantes de espectadores. Esta cualidad le otorga una gran ventaja con respecto a otra forma de arte mucho más humilde y solitaria como lo es la literatura. Sin embargo, esta ventaja no siempre garantiza que su discurso sea más comprendido o internalizado por el público. Quizás sea por esto que el Film de Fernando Meirelles Ceguera (2008), no haya generado en el público el mismo impacto que ha ocasionado en cada lector la obra del Premio Nobel de Literatura (1998) José Saramago (1922) Ensayo sobre la ceguera (1995), y no porque como se suele argumentar: “ninguna película supera al libro”, supuesto que ya ha sido derrumbado por Peter Jackson  en sus tres films de El Señor de los Anillos y otros respetados directores. Sino porque, en el caso que nos ocupa, la